En mi opinión, existen casos en donde la IA si podría reemplazar a los humanos. La IA es una herramienta sumamente eficiente, sobre todo en tareas repetitivas y automatizadas. Por ejemplo, en la manufactura, el procesamiento de datos o el servicio al cliente mediante chatbots, en la actualidad las máquinas pueden asumir roles tradicionalmente ocupados por humanos, con mayor precisión y rapidez.Sin embargo, es importante recalcar que, en otros casos, la IA no podía reemplazar a los humanos ya que no dejan de ser máquinas, deberían continuar siendo una herramienta de apoyo. Tareas que requieren creatividad, empatía, juicio moral o la capacidad de tomar decisiones complejas seguirán siendo dominadas por humanos, ya que las máquinas carecen de las habilidades emocionales y sociales que son fundamentales en estos contextos.Por lo tanto, la clave está en ver a la IA como una herramienta que puede potenciar nuestras capacidades más no sustituirnos.